Bueno, va un pequeño relato sobre nuestro año Nuevo en Atlantic City y NYC. Si durante alguna parte del relato, no conocen a algún personaje mencionado/a, no importa.
Luego de pasar una buenísima navidad en Washington DC en la casa de Pablo Salinas y familia, dirigimos el BOTE (gracias Tío Bill) para noreste y, con un nuevo integrante en la travesía, el estimado Gustavo Ruiz y su brillante GPS, partimos rumbo a Atlantic City. Esta ciudad del estado de New Jersey es, después de “Las Vegas”, el paraíso de los apostadores en este país. “Atlantic City, baby!”, como diría Phoebe. Llegamos luego de unas 5 horas de manejo desde Washington DC, respetando a rajatablas los límites de velocidad impuestos en las carreteras americanas (demasiado cara es la multa y la ruta está bastante cargada de policías). El arreglo era normalmente: adelante, MOD (alternando con Paty), GUS y yo (sí, en el bote caben tres personas incómodas adelante, pero con cinturón de seguridad y todas las reglas de tránsito respetadas) y atrás, Paty (alternando con MOD), Chiara y Karen.
Pueden hacer click en las fotos para ver álbumes completos (gracias MOD).
La idea era, en honor a los carísimos amigos Alberto Ramírez, Fernando Valleau y Victor Cálcena, tirar unas fichitas en alguno de los innumerables casinos de la zona. El resultado fue: lindas fotos y una noche entera de recorrer todos los casinos de la zona. Bien amargo.
Las chicas, por supuesto, se quedaron en el hotel. El casino les parece tan aburrido como a nosotros los Shoppings. Así que, perfectamente comprensible. Lo cierto es que estuvimos recorriendo los casinos desde las 6 de la tarde hasta la 1 de la mañana. Las enfermizas apuestas fueron:
Yo: salí en caja apostando 5 US$ en un VIDEO POKER más asesino que el gráfico del NIÑO REY.
Gus: 5 US$ abajo en VIDEO POKER y TRAGAMONEDAS.
MOD: en caja porque no apostó ningún centavo.
Después, en apuestas comunitarias que hicimos los tres, perdimos 6 US$ (2 cada uno) en un juego muerrrto que no conocíamos. Una especie de ruleta de kermesse bien difunta. Se llama “Big Six Wheel”.
He aquí una foto sacada de INTERNET porque dentro del CASINO, solo Ramírez se anima a sacar fotos.
No apostamos nada porque básicamente los precios de las apuestas mínimas son prohibitivos (15 US$ {gracias Victor} para arriba). Los torneos de PÓKER que queríamos jugar costaban 80 US$ (para el pozo) + 20 US$ (comisión del casino), así que, era imposible. Había mesas abiertas también, pero para sentarte, tenías que cajear por lo menos 60 US$ y jugabas en mesas de ciegas de 1-2 (mesa de pobres), o también en mesas más saladas. Había un torneo que era un poco más barato 35 US$ + 15 US$ pero creo que empezaba a las cuatro de la mañana o algo así. Imposible.
Al día siguiente, partimos para NYC. Otras cuatro horitas de viaje.
NYC es, desde ese día (29 de diciembre de 2006), por lejos, mi ciudad favorita. Im-pre-sio-nan-te. Nunca vi nada igual. Al llegar, tenía preparado en un CD de MP3 que íbamos escuchando, “New York” del álbum “All That You Can't Leave Behind” de U2 y, por supuesto, sonó justo en el momento de atravesar el “Brooklyn Bridge” (puente que conecta la isla de Manhattan con el barrio de Brooklyn que están en Long Island. Aun con el GPS del Tío Gus, estábamos perdidos, pero no importa). Una vez más, el SMS tenía razón: “No podés morirte sin haber vivido por lo menos un par de meses en la isla de Manhattan”.
The Irish have been coming here for years
Feel like they own the place
They got the airport, city hall, concrete, asphalt, they even got the police
Irish, Italians, Jews and Hispanics
Religious nuts, political fanatics in the stew
Living happily not like me and you
That's where I lost you...New York
Ese primer día que llegamos, quisimos conocer el sur de la isla y, si por ahí encontrábamos, queríamos visitar “Ground Zero” del World Trade Center. Gracias a la grandeza de Gus (realmente fue una casualidad tremenda) lo encontramos.
El segundo día, fue de visita a “Ellis Island” y a “Liberty Island”. La primera, es una isla que por mucho tiempo en el siglo XIX fue punto de entrada de todos los inmigrantes que venían a la costa Este de USA y hoy es un museo, y la segunda es la isla en la que reposa, mirando la isla de Manhattan, la famosa “estacua” (gracias Chiara) de la Libertad. La visita se hace en un barquito muy moderno, y durante el recorrido, se aprecia bastante bien el sur de Manhattan.
Gus no nos acompañó porque fue de visita a lo de su tía. Después lo buscamos de ahí y comimos comida paraguayísima: empanadas, chipa guazú, choricitos, etc, etc, etc.
El tercer día (último día de 2006), fuimos a la ciudad propiamente dicha: Central Park (estuvimos solo en la parte sureste), Fifth Avenue, El Rockefeller Center, Empire State Building para terminar la jornada en la mítica Time Square. Todo muy, muy, muy lindo. Sabía que me iba a gustar mucho, pero no me esperaba tanto.
En la esquina más cara del mundo (en teoría), hay un bruto nuevo local de Apple. Tío Pico, no sé si ya estuviste (creo que no porque es bastante nuevo el local) pero realmente te vas a volver loco con el Store. Tiene TODA LA ONDA APPLE que podés encontrar en la “BIG APPLE”.
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| From NYC |
Fíjense el simbolito de APPLE en el fondo. Es un cubo de vidrio. Hay una escalera que te lleva al MEGA STORE. Estaba lleno de gente.
Antes de volver a INDIANA, pasamos una noche más en DC. Ahí cenamos en la casa de la hija del PRESI Luis Puente, con quien compartimos una cena muy buena con numerosas anécdotas de más de 20 años de dirigencia deportiva y 3 años al frente de la institución más gloriosa del país.
Bueno, eso por ahora es todo. Mañana arranca el nuevo semestre y sigo debiendo un informe de la universidad y la vida en Bloomington propiamente dicha.
I HEART NYC.
ASC para todos.
